Un vistazo al futuro

Llega un momento en la vida en el que te das cuenta de que estás atrapado en un ciclo que te lleva a un círculo vicioso. Lo peor es que este círculo vicioso no es el mismo de ayer, ya que hoy eres un día más viejo y la fecha de tu muerte se acerca cada vez más.

Creo firmemente que, en algún momento, nos encontraremos con el gran creador y lo primero que nos preguntará es: “¿Qué has hecho con los talentos que te he otorgado?” Ese día, quiero poder mirar hacia arriba y decirle que los he explotado al máximo, convirtiéndome en mi mejor versión.

Si no dejas un legado en este mundo, una razón por la que te recuerden, entonces has perdido tu tiempo.

No me refiero a que solo tus seres queridos te recuerden, eso es fácil. Me refiero a que el mundo nunca te olvide, piensa en personas como Steve Jobs, Maradona, Pele, Robin Williams, Charles Chaplin, etc.

Personas que nunca serán olvidadas y que utilizaron su paso por el mundo como una oportunidad para cambiarlo. Eso es lo que debemos aspirar a ser, y para lograrlo, debemos creer y actuar de manera diferente al resto del rebaño.

Antes de considerarme con alguna autoridad para enseñar algo, aplicaré este método en mí mismo. Me considero una persona agradecida pero insatisfecha.

Mi punto de partida no es muy diferente al de las personas comunes; de hecho, en algunos aspectos, estoy por debajo del promedio. Sin embargo, en otros aspectos, estoy muy por encima.

Estoy por debajo en aspectos como tener una vida social y amorosa abundante y una apariencia física socialmente aceptada como ideal. Tengo pocos amigos y pocas personas me escriben para algo que no sea pedirme un favor.

Pero, a pesar de todo, estoy agradecido por tener una familia cercana que me ama y a quien amo, una amiga de calidad y muchos animales que me hacen feliz.

Me siento superior porque siempre tengo hambre de cambiar el mundo y de ser una mejor persona. Soy insatisfecho, creo en los procesos y el trabajo duro, y me considero opuesto al sistema. Veo todo desde una perspectiva diferente y no soy fanático de nada más que de hacer que mi vida sea mejor.

Compito conmigo mismo y, para superarme, he establecido diez objetivos iniciales que iré aumentando con el tiempo.

Mi objetivo es seguir una campaña con una disciplina similar a la del ejército y, después de 30 días, tener una versión mejorada de mí mismo.

Esto no será una página de motivación, sino una guía paso a paso para ayudarme a mí y a muchas personas comunes a cambiar sus vidas para siempre.

He elegido la disciplina militar porque la he experimentado en primera persona y conozco su estricta disciplina y los cambios que puede provocar en la vida de las personas.

Por lo tanto, cuando termine este proceso, presentaré mi campaña “EL CAMINO DEL GUERRERO» al mundo entero.

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